Estratoférico tapón de Jakim Donaldson a Brad Newley |
El pasado viernes 21, se jugó el encuentro de vuelta de la Copa Toyota, con un lleno casi absoluto (4700 espectadores) en el Pabellón Santiago Martín ansiosos de ver ACB.
La impresión que nos dejó el encuentro, es que nuestro equipo atesora un Lexus en sus entrañas, aunque le falta el rodaje suficiente. Por un lado, las nuevas incorporaciones se tienen que adaptar entre sí, y por otro, adaptarse a una categoría muy exigente, no en vano, es la mejor liga de Europa, donde las defensas son férreas (Richotti y Blanco recibieron sendos golpes) y en donde los ataques, y como dice Manel Comas, “siempre hay que sumar.”
Desde el inicio, nos percatábamos que por parte del Herbalife Gran Canaria, la defensa y el tiro exterior eran sus armas, mientras el C.B. Canarias se basaba en el juego interior y una defensa más endeble.
La conclusión que sacamos, que jugando así, y con las imprecisiones de un equipo aurinegro, que tiene la maquinaria Lexus, que no está apunto, pensamos que su recorrido de mejora está aún por ver, con todo, sólo se perdió de cinco puntos (80-85).
¡VAMOS CANARIAS!