El presente mes el blog Tiembla Heliodoro (Pincha aquí) realizó un magnífico artículo elaborado por Javier Rodríguez Mejías, sobre nuestra Peña: el Frente los Pollos Amarillos, y que pasamos a reproducir íntegramente, pero antes queremos agradecer el gran detalle que han tenido con nosotros.
Hasta hace un par de temporadas, si nos hubiesen preguntado acerca de la afición aurinegra siempre hubiésemos ligado el nombre del Club Baloncesto Canarias al de la Peña San Benito. Pero desde el 8 de febrero de 2008, e representativo cuenta con otro referente en las gradas del Santiago Martín, Los Pollos Amarillos.
Precisamente de nuestro anterior inquilino de la sección, nace esta agrupación con el objetivo de dar un “estilo nuevo e innovador de animación”. Para ello, Miguel Ángel Torres Rodríguez y un grupo de amigos fieles al club comienzan a dar forma a esta innovadora idea que pocos meses después ve la luz. El Bar Brezo, lugar de reunión por aquel entonces de los aficionados canaristas, es el testigo directo de este nuevo miembro de la hinchada lagunera.
En su primer año oficial fueron 120 los componentes que se unieron a este ambicioso proyecto de mundo de la canasta. La aceptación de esta “pequeña gran familia” ha sido inmejorable puesto que, como nos dice su director “comenzamos de un modo muy humilde y hemos conseguido ser grandes”. A día de hoy son 150 los implicados que jalean a los suyos cada jornada y trasladan su particular entusiasmo a la parroquia tinerfeña.
Al igual que su homónima en el recinto tinerfeño, el compromiso y la disposición con la directiva es total. A pesar de no haber tenido un dulce transitar de categoría valoran el esfuerzo que se ha hecho desde la entidad para este costoso ascenso. Algo que se ha logrado gracias a que “la mayoría de nuestros directivos son canaristas de corazón”.
El ritual previo a cada encuentro de esta “alocada” peña está muy bien definido: “Normalmente quedamos dos horas antes en un bar patrocinador de la peña, La Manigua, en los aledaños del Santiago Martín. Allí compartimos tertulias sobre baloncesto con diferentes puntos de vista, cánticos y mucha diversión. Una hora antes del partido entramos para colocar nuestros bombos y continuar nuestra particular fiesta hasta que comienza el choque”.
Cuando preguntamos a Miguel Ángel por el mejor y peor recuerdo de la historia de la agrupación, lo tiene muy claro: “El mejor recuerdo para mi es el día del debut de la peña en el Ríos Tejera y el día del ascenso a la élite del baloncesto. El peor fue cuando nos enteramos de que el Gobierno de Canarias jugó con los sentimientos de todos los canaristas y nos dejó desamparados cuando más los necesitábamos”.
Al igual que cualquier socio o aficionado a este club tan cercano, la relación con los jugadores es inmejorable. Cada semana vemos como varios integrantes de la plantilla se acercan al fondo en el que han quedado ubicados esta temporada, para agradecerles el incondicional apoyo y unirse a su particular fiesta. Desde la peña la respuesta es inmediata para procurar que “sigan sintiéndose importantes y se vean como un pollo más”.