En el inicio de la temporada (2013-2014) de su 75
aniversario, el Club Baloncesto Canarias, está consiguiendo cotas que nos hacen
soñar.
El sábado pasado, los aurinegros sumamos nuestra tercera
victoria consecutiva en la Liga Endesa, consiguiendo niveles que ningún otro
equipo ha conseguido en Canarias.
La afición en general, y concretamente nuestra Peña tiró del equipo, para alcanzar un
triunfo ante un Baloncesto Fuenlabrada, que tuvo un tiro desde el perímetro demoledor.
Hoy estaríamos hablando de otra cosa, si no hubiese existido
en la cancha, la determinación grandiosa que hace gala el C.B. Canarias, que se
traduce en trabajo y sacrificio.
No olvidemos, que este equipo se encuentra sensiblemente
mermado por las lesiones de Levi Rost y Fotis Lampropoulos, y el mérito de lo
conseguido es extraordinario. Y gran parte de la culpa, de estar situados entre
los grandes de la ACB, la tienen el pívot Blagota Sekulić y el alero Saúl Blanco. Nuestro
pívot, anotó 32 puntos, con 11/13 en tiros de dos, 2/4 en triples y 4/6 en
tiros libres. Capturó también 8 rebotes, repartió una asistencia, recuperó un
balón y recibió 8 faltas, convirtiéndose en el MVP de la jornada.
Hoy finalizamos, destacando lo que se ha convertido en una
realidad fehaciente, ganándose apulso, nos estamos refiriendo, a lo que pregonó
la afición en el Pabellón Santiago Martín al final del encuentro tras la
victoria (90-82); “Esto sí que es un
pedazo equipo”, un C.B. Canarias de Ensueño.
Somos consciente que debemos tener los pies en el suelo,
porque esto acaba de empezar, pero la situación nos llena de ilusión y orgullo.