El Canarias remó y remó pero se hundió antes de llegar a la
orilla, acumulando de esta forma la quinta derrota consecutiva, tras perder
ante el CAI Zaragoza por 75 a
78. Los aurinegros lucharon con uñas y dientes por la victoria hasta el último
momento, donde el protagonista, fueron los tiros desde la línea de 4,60, y un
triple errado que nos pudo haber dado la victoria.
Lazaros Papadopoulos, el nuevo pívot canarista, que debutó
en el segundo cuarto cuando íbamos 13 puntos abajo, dejó su impronta. El center
griego desatascó el ataque, 10 de los 11 puntos del Iberostar Tenerife llevaban
su sello, pasando el marcador de un 21-34 a un 32-35. Sin embargo, el escenario final nos
dejó a todos con un cierto sabor agridulce, por un lado la derrota, y por otro
la esperanza que con Lazaros en cancha, cuando vaya cogiendo la forma y
conociendo a sus compañeros, esto puede pintar de otra manera.
Ahora toca mirar hacia delante, y conseguir las tres o
cuatro victorias que nos garantice la permanencia, y para ello, contamos con la
predisposición y el trabajo de un grupo de jugadores que lo darán todo.
¡VAMOS CANARIAS!
