No hay secretos para el éxito, tal vez, éste se alcanza preparándose, trabajando arduamente y aprendiendo del fracaso.

El 8 de abril de 2012 pasó a los anales de la historia del baloncesto de la Provincia de Tenerife y del Club Baloncesto Canarias como la fecha, que marcó nuestro retorno a la segunda mejor liga del baloncesto del mundo, la ACB, y que se ganó brillantemente en la cancha. Pero esto no ha sido posible hasta el día de hoy, día 20 de julio, casi cuatro meses después, donde se nos ha abierto las puertas del lugar que le corresponde a este Club, y por lo que muchos han luchado y soñado.

Hemos recorrido un camino que no ha sido sencillo, jalonado con algunas piedras y espinas, donde algunos han intentado que desapareciéramos, pero la raza de su afición es única, y las pruebas están ahí para demostrarlo.

La afición y los gestores del Club, en muchas ocasiones hemos tenido que callar, tragar, consentir… al objeto de sacar al Club del pozo donde nos ubicaron.

Hoy, el trabajo, el sacrificio de muchos se verá recompensado con este ascenso ACB.

La fe, que hoy es “espartana” se ha ido curtiendo durante los años, y que se desprende durante los partidos por una “AFICIÓN” inigualable, se pueden cambiar de jugadores, de entrenador, de directivas pero jamás de este sentimiento que es el aurinegro.