Anoche, en la Ciudad Patrimonio de la Humanidad, San Cristóbal de La Laguna, se celebraba “La Noche en Blanco” donde, la aglomeración se estimó en 150.000 personas. Circunstancia ésta, que hacía prever que la afluencia al encuentro Lagun Aro, iba a restar público, cosa que no ocurrió, concurriendo al Pabellón Santiago Martín, 3.826 espectadores.
El objetivo era uno, LA VICTORIA, y se consiguió, gracias a un Ricardo Úriz, que volvió a dar una lección magistral de cómo se debe dirigir un equipo, acompañado de un Carles Biviá que va tomando nota de lo que se debe hacer, de un Jakim Donaldson (11 rebotes), que fue el amo y señor en los tableros, de un Levi Rost (22 puntos), que destrozaba desde la larga distancia y como falso pívot a los pupilos de Sito Alonso, y que decir, de Jesús Chagoyen, que tras decisión acernadadísima del Alejandro Martínez, entró en escena para dar consistencia en defensa y en ataque. Pero, la cosa no queda aquí, puesto que Saúl Blanco, no sólo aportó ataque, sino que ayudó muchísimo en defensa, y ahí están sus 6 rechaces, también, se unió al trabajo, Nico Richotti, con 13 puntos en tan solo un cuarto, y no podía faltar, Fotios Lampropoulos, demostrando calidad y dureza en defensa, junto a Blagota Sekulić que coartaron la labor de los pívot del Lagun Aro.
Destacar, la excelente labor desde el banquillo, de Alejandro Martínez, que leyó en todo momento el encuentro.
En definitiva, primera victoria y primer regalo a la afición en casa (93-78), que supone un antes y un después, que pasará a la memoria histórica de los seguidores del Club Baloncesto Canarias.
¡FELICIDADES AFICIÓN!
¡VAMOS CANARIAS!