El Canarias derrota a Goliat. Permítanos este símil, como escenografía de lo acaecido en la tarde del domingo 13 de mayo, de acuerdo con la narración bíblica. Un soldado gigante del ejército filisteo, que asedió al ejército judío, y que fue vencido por David, es decir; el Iberostar Tenerife.
El equipo aurinegro ha establecido una guerra por alcanzar los playoff, y el resultado ante el todo poderoso equipo azulgrana (86-81), se cimentó gracias al trabajo y el esfuerzo.
La puesta en escena de los de Fotis Katsikaris fue excepcional. Con ganas borrar la derrota la semana pasada ante le Estudiantes, y mostrar su mejor cara, los pupilos del técnico griego exhibieron un nivel defensivo maravilloso. El tempo del encuentro, era aurinegro y se jugaba a lo que querían estos.
Pero con la llegada del último cuarto, restaba todo un mundo, y todo es posible en el baloncesto -todavía más en el contemporáneo-, donde la velocidad de ejecución es la panacea. En estado de cosas, los catalanes se pusieron el mono defensivo intentando ponernos entre la cuerdas.
Vasileiadis se hizo protagonista de los últimos momentos del choque con varias acciones de mérito, si bien es cierto que la afición canarista brindó ovaciones a todos y cada uno de sus jugadores, por el esfuerzo exhibido.
